Querido Carlos Hache

José Couso
José Couso

Si Carlos H estuviera en el Norte de África estos días, seguro que se lo pasaría en grande narrándonos al resto de los mortales que estamos al otro lado de la tele, o de Internet, la revolución democrática que agita la zona, que comenzó en Túnez, sacude Egipto y parece que seguirá extendiéndose. Ojalá (lawšálláh, si dios quiere; esta interjección española de origen árabe viene como anillo al dedo en este contexto) que esta revolución 2.0 traiga, de la manera más pacífica posible, gobiernos comprometidos con la paz, la justicia social, el progreso, la libertad y la democracia. Carlos H se emocionaría y nos emocionaría con historias como las ocurridas en El Cairo, en donde hubo gentes  que hicieron una cadena para proteger los tesoros del Museo Nacional y evitar así el saqueo que se podía haber producido en un momento de borrachera revolucionaria. Porque no todo vale, por mucho que las revoluciones sean pacíficas y persigan un fin justo. Y precisamente porque tampoco todo vale en las guerras, Carlos H ha vuelto a Irak, a Bagdad, para participar como testigo en la comisión judicial del magistrado Santiago Pedraz, que ha reconstruido el asesinato del cámara de Telecinco José Couso hace ocho años a consecuencia de un disparo de un tanque norteamericano contra periodistas apostados en el Hotel Palestina de la capital iraquí, y nos lo ha estado contando en elmundo.es. Los periodistas eran testigos molestos de los muchos desmanes cometidos en la bárbara guerra de Irak, que Carlos H cubrió para Antena 3. Y también son testigos imprescindibles de momentos tan hermosos como el de una cadena humana protegiendo un museo en la capital egipcia. Carlos Hache lo sabe bien. Carlos H es el extraordinario periodista Carlos Hernández, mi ex jefe, mi amigo.

Posdata.- El martes 5 de abril, un par de meses después de escribir este post, se confirmó el regreso de Carlos Hernández a la Dirección de Comunicación de la Ejecutiva Federal del PSOE. Di saltos de alegría cuando lo supe. Para mí, es una de las mejores noticias de lo que va de año. Carlos H, mi amigo, vuelve a ser mi jefe.

¿Y si…

Tunisie libre
Tunisie libre

… la revolución cívica que ha expulsado de Túnez al tirano Ben Alí se extiende como una mancha de aceite por todos los países árabes que bordean el Mediterráneo y llegan más allá? ¿Y si cunde el ejemplo tunecino y se acaban estableciendo en todos ellos democracias modernas, avanzadas, representativas, equiparables a Occidente, laicas, que destinen todas sus riquezas y recursos al desarrollo de sus sociedades, que garanticen los derechos humanos básicos y la igualdad de las mujeres? Esa sí que sería una fabulosa transformación para esta recién comenzada segunda década del siglo XXI.

El Zócalo en Madrid

Julieta Venegas
Julieta Venegas

Una entretenida recomendación de ocio y cultura para este próximo fin de semana, para quien pueda y quiera acercarse: «México celebra el Centenario de su Revolución del 18 al 21 de noviembre en la Plaza de España en Madrid, donde durante cuatro días habrá gastronomía mexicana, música y las Rutas de México para recordar los cien años del inicio de la lucha de la Revolución Mexicana», informa Europa Press. «La banda sonora de esta celebración vendrá de la mano de conciertos gratuitos de importantes artistas mexicanos como Julieta Venegas -el sábado a las 13 horas, en su primera actuación en España tras su maternidad- y los grupos Instituto Mexicano del Sonido -domingo, 13:30 horas- y Kinky -domingo a las 16:00-. Además, en la Plaza de España se podrán conocer las propuestas de Rutas de México y disfrutar de una gastronomía considerada Patrimonio Cultural Intangible de la Humanidad. No faltarán los grupos de mariachis y de danza folclórica. El 20 de noviembre de 1910 los campesinos mexicanos, organizados en ejércitos liderados por Emiliano Zapata y ‘Pancho’ Villa, entre otros, se levantaron contra el dictador Porfirio Díaz al grito de Tierra y Libertad. Fue la primera gran revolución social en América Latina y sentó las bases del futuro de México.» En definitiva, un pedazo del Zócalo del DF, trasplantado a la Plaza de España. ¿Tiene buena pinta, no?