Kubik Fabrik, Historia de Usera

Kubik Fabrik
Logotipo de Kubik Fabrik

Érase una vez unos creadores, milagreros laicos y talentosos, que abrieron una sala de teatro en un barrio que posiblemente jamás imaginó tener una sala de teatro así. Aquella locura maravillosa se llamó Kubik Fabrik y ha estado en cartel seis años, seis años repletos de obras de altísima calidad que han merecido aparecer en periódicos nacionales que han convertido a Usera, a mi barrio, quién se lo iba a decir, en un referente en la escena alternativa de Madrid. Por arte casi de magia, por la Kubik fueron y vinieron obras que nos hicieron pasarlo en grande a sus seguidores, asombrados de la fortuna de contar en este barrio con un portento de estas características. Por desgracia, aquella maravillosa experiencia tuvo que cerrar el pasado verano, y lo ha hecho con una obra, Historias de Usera, que convierte Usera y sus historias en un emocionante retablo teatral de pequeñas piezas encadenadas sobre leyendas urbanas y episodios sucedidos en la historia reciente de este distrito, dramatizadas por autores de primer nivel, inspiradas en gentes sencillas y trabajadoras, las gentes sencillas y trabajadoras sobre las que recae el peso del mundo. El proyecto nació como una aplicación, Storywalker, que permite escuchar  estas mismas historias en los lugares del barrio donde sucedieron. Son historias de Usera, sí, pero podrían ser historias universales de cualquiera de los barrios de este país, de esas que ocurren en las barriadas trabajadoras como la que yo me crié en Carabanchel, con sus bloquecitos de ladrillo visto y los descampados de arena indefinida que tan presentes están en esta obra. El director de Kubik. Fernando Sánchez-Cabezudo, y su tripulación, encabezada por Fabián Ojeda, se han despedido del barrio con una obra que es todo un homenaje. Sobre las tablas de esta pieza, que se pudo ver hasta este domingo en Matadero después de interpretarse en Kubik hasta el pasado verano, se han juntado actores y actrices veteranos junto a un entrañable reparto de vecinos, toda una proeza que da sentido a la vocación de la Kubik de ser un espacio al servicio de los ciudadanos de este distrito. Será difícil, a partir de ahora, no pasar por la calle donde se ubicaba la Kubik y no sentir un pellizquito de nostalgia en el corazón. Se han despedido del barrio y de sus historias, pero ya forman parte para siempre de la historia de este barrio. Buena suerte, compañer@s, muchísimas gracias por habernos hecho tan felices con vuestro arte.

 

Usera, puerto de mar

Barco
Barco infantil, listo para colorear

Semana a semana se produce el milagro. Una sala de teatro, nave más que sala por la singladura en la que nos embarca a tod@s, hace que este modesto barrio de Usera se haga la mar océana de las artes escénicas de la mano de obras de primer nivel, nunca antes vistas en un barrio como este y que antes, para ser vistas, requerían que uno tuviera que desplazarse hasta el centro de la ciudad. Sopla el viento, se inflan las velas. De todas las obras que he visto este año, ahora que llega el final de 2014 y a los humanos nos gusta hacer balance, me quedo con cinco piezas que me encantaron: Mendoza, de Los Colochos Teatro; Yo de Mayor quiero ser Fermín Jiménez, de El Pont Flotant; El Minuto del Payaso, de Teatro el Zurdo; La cena del Rey Baltasar, de la Compañía Los Números Imaginarios, y El Examen de los Ingenios, de Bedlam Teatro. Me dejo alguna en el tintero fijo, porque alguna obra que quise no pude ver, pero este ramillete me trae a la memoria un montón de recuerdos y de agradecimientos a los hacedores de esta magia y de tanto arte. Y cualquier elección es injusta y parcial, porque, para mí, tiene mucho, muchísimo mérito, quien salta a las tablas, vence su miedo y nos hace partícipe de su obra y de su arte, pues tal es el objeto del teatro. La Kubik Fabrik y sus arrojados y animosos tripulantes transforman a esta periferia en el centro de la ciudad, con gentes de todo Madrid que se acercan hasta aquí para presenciar el milagro. Y, ojo, que en 2015 prometen muchas sorpresas para seguir creciendo, así que atentos al telón. Semana a semana, la Kubik convierte a Usera en un puerto de mar, con barquitos atracados y barquitos a punto de zarpar.

Terapia por duplicado

Silbatriz Pons
Silbatriz Pons

Dos obras en la Kubik este fin de semana, ambas balsámicas y recomendadas para masajear los sentidos, ganadoras del Festival de Piezas Work in Progress Croquis. Se pueden ver en doblete, con lo cual el tratamiento es doblemente eficaz. La primera, una pieza de dramaturgia audiovisual, que se ve sobre las tablas, pero que se sigue también en pantalla merced al ingenio de Vicente Colomar en La invasión de los ladrones de cuerpos, con dos mensajes fundamentales:

  • Cómo sería el mundo si los humanos no fuéramos tan humanos.
  • Somos animales movidos por instintos primarios.

La segunda, Episodio 08, una obra también en desarrollo, representada por Silbatriz Pons. Una pieza que no busca una interpretación a lo que ocurre en el escenario, sino a lo que ocurre dentro de nosotros, mediante el embrujo del silbido de su protagonista. Absténganse de verla quienes procuran siempre encontrar sentido a todas las cosas. La existencia ocurre porque sí, y en la magia de vivirla sin necesidad de aprehenderla está el truco para ahorrarse sufrimientos. Toda una terapia.