
Estos días de tanta figurita religiosa de belén se prestan -por contrarrestar- a la reivindicación de alguno de nuestros compatriotas considerados como santos laicos, figuras cuya obra les ha hecho ascender a los altares de la memoria histórica colectiva sin necesidad de incienso, y sí a lomos del fervor popular como reconocimiento a la grandeza de su arte. En este santoral sin mandorla mística descuella el nombre de un poeta, el sevillano Antonio Machado, a cuyos versos puso música Joan Manuel Serrat en un extraordinario disco de 1969. Algunos de los versos contenidos en los machadianos Proverbios y cantares versionados por el cantautor catalán son tan conocidos como muchos de los villancicos que forman el hilo musical permanente de estas jornadas; y, desde luego, mucho más conmovedores. ¡Anímate, Faktuna, a entonar alguno, que no todo va a ser El Tamborilero!